Newsletter DPT Nro. 29

ISSN 2618-236X

Septiembre / 2018

Bases genéticas de la soledad y del aislamiento social

La codificación genética asociada a la soledad permitiría explorar factores de riesgo modificables


La soledad es la causa raíz de muchos fenómenos clínicos registrados diariamente en ciertos pacientes. La práctica clínica, que frecuentemente no toma en cuenta la vida social de los pacientes, condena al fracaso a muchas intervenciones orientadas exclusivamente a lo inmediato o sintomático.

El aislamiento social está fuertemente asociado con la depresión, el suicidio, la ansiedad, el insomnio, el miedo, las fobias y la percepción de amenazas, así como con demencia, hipertensión arterial, enfermedades cardíacas, obesidad, diabetes, accidentes cerebrovasculares, menor resistencia a las infecciones, enfermedades autoinmunes, accidentes domésticos y de tránsito. La soledad es además un predictor de la progresión de la enfermedad de Alzheimer y altera la transcripción del ADN en las células del sistema inmune.

La evidencia empírica disponible indica que la soledad que enferma y mata es la “soledad percibida”, que está determinada por la profundidad y calidad de los vínculos, más que por su cantidad.

En el Reino Unido una de cada cuatro personas mayores de 65 años sufre de soledad, un estado social fuertemente asociado con una mayor mortalidad por diferentes causas. La magnitud de este efecto es comparable al tabaquismo, y excede otros factores de riesgo de mortalidad bien establecidos como la obesidad y la carencia de actividad física.

Si bien los impactos negativos del aislamiento social y la soledad en la salud están bien documentados, poco se conoce sobre sus posibles determinantes biológicos. Para abordar esta cuestión y proporcionar información sobre los posibles mecanismos biológicos que contribuyen a la soledad, el estudio reseñado tuvo el propósito de indagar la asociación del genoma con la soledad, mediante la identificación de variantes genéticas provenientes de una muestra de 452.302 participantes dentro del UK Biobank (del Reino Unido).

Se realizaron análisis de asociación de genoma completo para la soledad y la participación regular en actividades sociales. Se identificaron 15 localizaciones (loci) genómicas para la soledad, y se mostró una posible asociación causal entre la adiposidad y una mayor susceptibilidad a la soledad y los síntomas depresivos.

Se identificaron otras localizaciones (loci) para la asistencia regular a clubes deportivos o gimnasios, pubs o grupos sociales o religiosos. A través de estos rasgos se manifestó un fuerte enriquecimiento para genes expresados en regiones del cerebro que controlan la expresión y el comportamiento emocional. Se mostraron mecanismos etiológicos específicos para cada rasgo, además de identificar loci que son pleiotrópicos en múltiples rasgos complejos.

Los hallazgos destacan la base genética específica para la interacción y el aislamiento social, proporcionando una base genética para explorar los posibles factores modificables de riesgo de aislamiento social.

Acceso a datos:

Tofos los datos del UK Biobank están disponibles bajo aplicación (www.ukbiobank.ac.uk) y los sumarios estadísticos del GWAS pueden descargarse de https://doi.org/10.17863/CAM.23511.

Fuente: “Elucidating the genetic basis of social interaction and isolation” Felix R. Day, Ken K. Ong & John R. B. Perry, Nature Communications. Volume 9, Article number: 2457 (2018) 3/07/2018. DOI: 10.1038/s41467-018-04930-1