Newsletter DPT Nro. 75
ISSN 2618-236X
Agosto / 2022
NOTICIAS EDUCATIVAS Y PEDAGOGICAS
NOTICIAS INTERNACIONALES
Afianzar la confianza en la investigación
Transparencia y ética como factores primordiales
La investigación científico-tecnológica está construida sobre una base de confianza: (a) los investigadores confían en que los resultados informados por sus pares estén adecuadamente fundados, y (b) la sociedad confía en que los resultados de la investigación reflejen un intento honesto por parte de los investigadores de describir el mundo de forma precisa y sin prejuicios.
Pero esa confianza sólo puede perdurar si la comunidad de investigación ejerce, profesa y ejemplifica genuinamente los valores asociados a la ética y la transparencia en, por ejemplo, el diseño y ejecución de investigaciones, la experimentación, el procesamiento de datos, la publicación de resultados, así como en la consideración de eventuales desvíos (discriminación, opacidad, fraude, plagio, adulteración de datos, irregularidades).
La presente reseña comprende tres artؙículos referidos a cuestiones de ética y transparencia en materia de investigación. El primero (1) trata sobre cómo mejorar la transparencia en la investigación en salud. El segundo (2) aborda la problemٔática de la cooperación internacional –entre países del norte y del sur- en materia de investigación. El tercero (3) describe un “juego” que promueve la reflexión y el debate sobre dilemas éticos en la investigación.
1.- Primer artículo: Cómo mejorar la transparencia en la investigación en salud (1)
Aunque en las últimas décadas se avanzó notoriamente en la visibilidad y accesibilidad de la investigación en materia de salud, aún queda un largo y difícil camino para hacerla transparente.
En la década de 1990, la digitalización de la investigación hizo posible, por primera vez, el acceso inmediato y masivo a buena parte de la evidencia. La posibilidad de buscar y consultar la evidencia a través de Internet permitió evaluar los beneficios y perjuicios de las intervenciones de salud con una solidez y seguridad desconocidas hasta entonces. La base para tomar las decisiones de salud se fue desplazando progresivamente desde las opiniones de expertos y los estudios aislados hacia el conjunto de la evidencia y la evaluación global de riesgos.
La irrupción de la “medicina basada en la evidencia” aportó confianza y transparencia en materia de investigación y atención en salud, pero con el tiempo se fue constatando que esa “transparencia” era más una aspiración que una realidad. La investigación en salud continúa siendo un inmenso “iceberg” en el cual las decisiones de salud sólo se basan en la investigación visible, pero existe una parte oculta, de importantes dimensiones, que distorsiona la imagen global de la evidencia y las decisiones de salud.
Si permanece oculta una parte importante de la evidencia sobre una cuestión de salud, la evaluación de riesgos queda sesgada y se toman malas decisiones. Estos “agujeros” en la evidencia no solo alteran y retrasan el conocimiento, sino que implican un elevado costo en forma de enfermedades y de muertes evitables, además de un derroche de recursos en investigaciones duplicadas.
Los ensayos clínicos aleatorizados están considerados como la mejor forma de conocer los efectos de una intervención de salud. Cuando se dispone de suficientes ensayos de calidad puede obtenerse una conclusión global sobre esos efectos con un razonable grado de certeza. Aun cuando se manifieste cierta disparidad entre los resultados de distintos ensayos, lo relevante es que los resultados globales apunten claramente hacia una misma dirección. Pero si una parte significativa de los resultados es invisible, se distorsiona la síntesis de la evidencia.
Ese déficit de transparencia, debido a que ciertos resultados no se publican, se ocultan o tergiversan, representa una grave amenaza para la investigación. Se estima que permanecen ocultos alrededor de la mitad de los ensayos clínicos que se realizan en el mundo, y que los resultados negativos tienen el doble de probabilidad de no ser publicados que los positivos. El “sesgo de publicación” (publicación o no de hallazgos según la naturaleza y la dirección de los resultados) es un problema complejo que aún no se ha encarado con suficiente resolución.
Gracias a la labor de organizaciones no gubernamentales (como All Trials, Cochrane, TranspariMed y otras) se van dando pequeños pasos para mejorar la transparencia. Pero para que se conozcan los resultados de todos los ensayos clínicos que se realizan es imprescindible un compromiso más decidido de los grandes centros y redes de investigación, de los gobiernos y del conjunto de la comunidad científica. También es necesario que se involucren en el debate los medios de comunicación y el conjunto de la sociedad.
Mientras continúen ocultándose los datos de miles de personas que participan desinteresadamente en los ensayos clínicos, el conocimiento científico permanecerá lastrado y se seguirán tomando decisiones de salud innecesariamente equivocadas.
2.- Segundo artículo: Fortalecer la integridad de la cooperación internacional en investigación (2.1.) (2.2.)
Los participantes en la séptima Conferencia Mundial sobre Integridad de la Investigación, realizada en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, entre el 29 de mayo y el 1 de junio de 2022, trataron un conjunto de problemas de equidad que plagan las asociaciones de investigación comprendidas en la “división global norte-sur”.
Varias sesiones del evento se dedicaron al diseño de un documento llamado “Declaración de Ciudad del Cabo sobre el fomento de la integridad en la investigación”, el cual ofrecerá orientación sobre cómo los investigadores de países de bajos y medianos ingresos (PByMI) pueden constituirse en socios igualitarios de los de países de altos ingresos (PAI) en proyectos internacionales de investigación. Se prevé formular un conjunto de principios para asociaciones justas y equitativas que ayude a los investigadores del sur global a denunciar prácticas injustas, tales como seguir preguntas de investigación impuestas por colaboradores del norte global que no benefician a las comunidades locales.
Según Lyn Horn, quien dirige la oficina de integridad de la investigación en la Universidad de Ciudad del Cabo. “aunque no todas las colaboraciones internacionales son problemáticas, abundan las prácticas injustas e inequitativas” … “Incluso las personas y los financiadores con muy buenas intenciones tal vez no entiendan cuán arraigados están algunas de sus prácticas y procesos”.
Asociaciones desiguales
A los investigadores de PByMI, la colaboración con colegas de PAI les proporciona ciertas ventajas, como financiamiento seguro y mejores perspectivas de carrera como resultado de trabajar con instituciones prestigiosas. Por su parte, los investigadores de PAI también se benefician porque acceden a nuevas responsabilidades y experiencias en distintas comunidades locales.
Pero estas colaboraciones pueden estar plagadas de inequidad. A veces, la investigación está financiada por instituciones y dirigida por investigadores que llegan con una pregunta de investigación completamente formulada que no aborda los auténticos problemas de la población local o ignora sus costumbres y tradiciones. La participación de los investigadores locales de PByMI frecuentemente se limita al trabajo de campo y la recopilación de datos, sin recibir el crédito justo por su contribución. Por ejemplo, en un análisis de 94 artículos sobre COVID-19 referidos a África, publicados en 10 de las principales revistas médicas, se determinó que 67% de los autores no eran africanos y que 1 de cada 5 artículos no exhibía autores africanos. En el peor de los casos, los investigadores locales no participan en absoluto (“ciencia desde el helicóptero”), o realizan un trabajo que no sería aprobado éticamente en los países más ricos (“dumping ético”). Es posible que los investigadores locales tampoco puedan acceder a los datos resultantes, dado que éstos se cargan en servidores de instituciones del norte global.
El 16/05/2022 se publicó un documento que: (a) describe los problemas y las posibles soluciones para su discusión en la conferencia, (b) enuncia preliminarmente valores y principios clave -como responsabilidad, respeto mutuo y equidad- que podrían incorporarse en la declaración, y (c) propone acciones que los financiadores, líderes de equipos de investigación, instituciones, revistas, editores e investigadores involucrados en estas asociaciones pueden tomar para restablecer el equilibrio.
Se señala que la versión final de la declaración deberá enfatizar en cómo las prácticas desleales pueden afectar la integridad, la validez y la confiabilidad de la investigación.
3.- Tercer artículo: Un “juego” que promueve la reflexión y el debate sobre dilemas éticos en la investigación (3.1.) (3.2.)
Un “juego” de ética -The Dilemma Game- desarrollado en la Universidad Erasmus de Róterdam (Holanda) tiene como objetivo que los investigadores reflexionen y debatan sobre dilemas éticos y de integridad con los que frecuentemente deben lidiar en soledad. Presenta un conjunto de complejos escenarios y pide a los jugadores que elijan entre 4 soluciones. El juego no indica “respuestas correctas”, sino que proporciona revisiones expertas.
El juego Dilemma Game fue presentado en la Conferencia Mundial sobre Integridad de la Investigación en Ciudad del Cabo, Sudáfrica. Más de 12.000 personas lo usaron durante los últimos 6 meses, y sus principales usuarios son investigadores residentes en Bélgica, Nigeria, Italia, Estonia, República Checa, India, Dinamarca y Turquía.
En una entrevista con Nature, Nick den Hollander, alto funcionario de políticas de la Universidad Erasmus de Róterdam, donde se desarrolló el juego, señaló que:
(a) La aplicación presenta diferentes escenarios para que los participantes reflexionen y debatan. Los dilemas están formulados desde la perspectiva de un estudiante de doctorado, profesor o editor de una revista. Por ejemplo: “Envié un artículo a una revista de alto nivel y fue rechazado, pero ahora mi supervisor me informa que conoce a un integrante del comité editorial y que podré publicarlo si lo incluyo como autor. ¿Cómo debo proceder?” Se proporcionan 4 opciones; por ejemplo: “rechazar la oferta y presentar una queja ante el comité de ética, porque mi supervisor intenta cometer fraude“, o “agregar el nombre de mi supervisor como autor”. Una vez que se elige una respuesta, se puede ver cómo votaron otros jugadores.
(b) Si bien no hay una respuesta correcta a cada dilema, la aplicación indica qué respuesta se acercaría más a la guía del Código de Conducta para la Integridad de la Investigación de los Países Bajos. Dicho código describe 5 valores fundamentales para la integridad de la investigación y ofrece una descripción general de 61 “normas”, que describen el comportamiento correcto. Por otra parte, puede accederse a una revisión de expertos escrita por el decano de Filosofía de la Universidad Erasmus que aporta diferentes perspectivas sobre cada respuesta. El objetivo es tratar de hacer pensar a cada usuario por qué eligió una respuesta en particular.
Hasta el momento, hay más de 100 dilemas, y cada mes se agrega uno nuevo.
Referencias:
(1) “El iceberg de la evidencia: Sobre la necesidad de mejorar la transparencia en la investigación de salud” Por Gonzalo Casino. Puntos de vista. Escepticemia por Gonzalo Casino. IntraMed / Fundación Esteve | 02 Jun 2022
(2.1.) Fuente primaria: “Fostering Research Integrity through the promotion of fairness, equity and diversity in research collaborations and contexts: Towards a Cape Town Statement (pre-conference discussion paper)” Lyn Horn, Sandra Alba, Fenneke Blom, Marlyn Faure, Eleni Flack-Davison, Gowri Gopalakrishna, Carel, IJsselmuiden, Krishma Labib, James V Lavery, Refiloe Masekela, Doris Schroeder, Natalie Simon, Christa Van Zyl, Sonia Vasconcelos, Retha Visagie, Francis Kombe. The 7th World Conference on Research Integrity (7WCRI) takes place in Cape Town from the 29th May 2022 to 1st June 2022. OSF Preprints. DOI: 10.31219/osf.io/bf286
(2.2.) Fuente secundaria: “African researchers lead campaign for equity in global collaborations: Cape Town statement on research partnerships between the global north and south will highlight unethical practices and offer advice to scientists” By Holly Else. Nature. News. 10 June 2022. DOI: 10.1038/d41586-022-01604-3
(3.1.) “This app helps researchers explore ethical dilemas: The creators of a game featuring research-integrity puzzles hope to open up discussions among scientists” By Holly Else. Nature Clarification 08 June 2022. DOI: 10.1038/d41586-022-01576-4
(3.2.) Netherlands Code of Conduct for Research Integrity