Newsletter DPT Nro. 69

ISSN 2618-236X

Febrero / 2022

NOTICIA PRINCIPAL

América Latina y el Caribe (ALC): Oportunidades regionales y desafíos globales en el nuevo contexto

En esta nota reseñamos tres artículos vinculados con las perspectivas de la región América Latina y el Caribe (ALC) para los años venideros. El primero (1) se refiere a las oportunidades y opciones de desarrollo de ALC en el contexto post-pandemia. En el segundo (2) se abordan los principales retos para el crecimiento en ALC. El tercero (3) trata sobre desafíos globales previsibles para los próximos años.

1.- Primer artículo: Opciones de desarrollo de América Latina y el Caribe (ALC) en el contexto post-pandemia (1)

Si en el año 2020 la atención mundial estuvo puesta en lidiar con los efectos directos de la Covid-19, durante 2021 el foco se centró en la recuperación de la actividad económica. Si bien la pandemia no fue aun superada, la reactivación económica adquirió prioridad y se convirtió en clave para el desarrollo América Latina y el Caribe (ALC) en el nuevo contexto.

Las perspectivas de los países de ALC

Los países de ALC fueron de los más afectados por la crisis sanitaria. Muestra de ello es que durante 2020 la economía de la región se contrajo cerca de un 6,7%. Si bien en 2021 se produjo un rebote de la actividad económica, el crecimiento no fue suficiente para llevar a la región a los niveles pre-pandemia. Hacia adelante, el panorama no es muy alentador: (a) no se dispone de suficientes recursos para sostener el crecimiento del gasto fiscal que impulsó la reactivación, y (b) la inflación comienza a inquietar. En este contexto, los pronósticos actuales apuntan a un crecimiento no superior al 3% en promedio para los próximos dos años.

¿Cómo promover un mayor dinamismo en las economías de la región?

Para promover un mayor dinamismo en las economías de la región cabe identificar tendencias globales y definir acciones para aprovechar las corrientes de cambio. Surgen así tres áreas como particularmente relevantes: (a) “nearshoring”, (b) transformación digital empresarial, y (c) una región verde y azul.

(a) Condiciones para aprovechar el proceso de “nearshoring”: En la actualidad se observa una tendencia, particularmente por parte de EE.UU., a revertir el proceso de traslado de industrias hacia el este asiático. Para ALC esta reversión representa una enorme oportunidad, pues se estima que aumentando sólo un 10% su participación en las cadenas globales de valor se generaría un aumento del 11% del PIB per cápita. Los países de la región deberán ser activos en promoción, pero sobre todo deberán generar las condiciones apropiadas para atraer a las empresas. Deberán fortalecer los sistemas nacionales de innovación para ofrecer a las firmas oportunidades de crecimiento continuo de la productividad, pero sobre todo será imprescindible disponer de una cantidad suficiente de recursos humanos calificados. Contar con talento es una condición clave para poder atraer empresas de alto valor, que generan empleos de calidad. Costa Rica adoptó como prioridad la formación de personal calificado en el marco del Programa de Innovación y Capital Humano para la Competitividad (PINN), apoyado con recursos del BID. Se destinaron recursos a financiar tanto certificaciones especializadas como formación acelerada de talento digital a través de Bootcamps internacionales. Ello permitió en los últimos dos años especializar a más de 1.800 personas, la mayoría de las cuales fueron absorbidas por empresas de producción de insumos y equipos médicos, sector que hoy representa más del 30% de las exportaciones y que sigue atrayendo firmas internacionales al país.

(b) Apoyar la transformación digital empresarial: La pandemia impulsó la digitalización forzosa de numerosas actividades. Uno de los riesgos que enfrenta la región es que este proceso continúe profundizando las enormes diferencias de productividad e ingresos entre grandes y pequeñas empresas, ya que estas últimas encuentran serias limitantes para adaptarse a la era digital. Varios gobiernos de la región implementaron programas para asistir la transformación digital de las firmas de menor tamaño. Un caso interesante es el de un programa que la Agencia Nacional de Desarrollo de Uruguay (ANDE) está comenzando a poner en marcha con apoyo del BID. Esta iniciativa propone acompañar a las empresas en su tránsito digital partiendo de un autodiagnóstico en línea que utiliza una herramienta diseñada para evaluar el estado de madurez digital de las empresas, para luego apoyar las estrategias de cambio con capacitación y asistencia técnica. El foco de las intervenciones es la forma en que las tecnologías digitales pueden contribuir al modelo de negocio de las empresas. El programa también ayudará a desarrollar la oferta de servicios de asistencia a las compañías, así como la generación de herramientas digitales adecuadas para responder a las particulares necesidades de este segmento de empresas.

(c) Una región verde y azul: En la Conferencia sobre el Cambio Climático (COP 26, Glasgow, nov. 2021) se propusieron metas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero bastante más ambiciosas que las previamente vigentes. Es claro que la COP 26 dio un nuevo impulso al combate contra el calentamiento global y que los países tendrán que redoblar esfuerzos para cumplir con sus compromisos. ALC es una de las regiones más afectadas por el cambio climático, pero al mismo tiempo tiene grandes oportunidades de contribuir a contrarrestarlo y dinamizar el crecimiento económico en el proceso. En efecto, su abundancia de recursos naturales y su amplia biodiversidad representan un enorme potencial de desarrollo a través de vías que contribuyan tanto a disminuir las emisiones de gases de invernadero, como a capturar carbono del medio ambiente. Algunos buenos ejemplos del potencial mencionado son: el aprovechamiento de sus cuantiosas fuentes de energía renovable (solar, eólica, hidro) para avanzar en la producción de hidrógeno verde; las posibilidades que se abren en el espacio de la bio-economía; o el uso sostenible de la flora y fauna marina en territorios marítimos protegidos. El aprovechamiento de estas oportunidades requiere, entre otras cosas, un mayor esfuerzo en investigación científica y en desarrollo de innovaciones. La buena noticia es que la mayor parte de la capacidad de investigación relevante de ALC se concentra en el área de las ciencias de la vida. Existe entonces, al menos, un buen punto de partida para lograr un desarrollo sostenible en este nuevo contexto.

El artículo concluye señalando que si bien la pandemia Covid-19 supuso un gigantesco reto en el corto plazo para las economías de ALC, también fue un catalizador de cambios. La crisis sanitaria aceleró la transformación económica en áreas como el “nearshoring” y la transformación digital empresarial, mientras que la lucha contra el cambio climático continuó siendo prioritaria. La innovación cobra así un papel aun más trascendental en este nuevo contexto económico.

 

2.- Segundo artículo: Retos previsibles para ALC en 2022 (2)

Los principales retos para el crecimiento y la generación de empleos en América Latina y el Caribe (ALC) son: la inflación en aumento, el manejo de la deuda, los problemas estructurales de baja inversión y productividad, la pobreza y la desigualdad. La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) -Alicia Bárcena- señaló: “Estamos ante un periodo de enorme incertidumbre en el que se profundizan las asimetrías y vamos a enfrentar menor crecimiento tanto del Producto Interno Bruto como del comercio.  Tendremos un contexto menos favorable para la región con un menor espacio fiscal y con presiones inflacionarias”. Bárcena destacó que, en ese escenario, es crucial la creatividad “para poder articular políticas fiscales y monetarias con mayor coordinación y con una mirada de mediano plazo”.

El estudio de la CEPAL atribuye la compleja realidad de la región en 2022 a la persistencia e incertidumbre sobre la evolución de la pandemia; la fuerte desaceleración del crecimiento mundial; la continuidad de baja inversión y productividad, la lenta recuperación del empleo; la persistencia de los efectos sociales provocados por la crisis; el menor espacio fiscal; los aumentos en las presiones inflacionarias; y los desequilibrios financieros.

Queda claro que, además de las políticas nacionales, hace falta el respaldo internacional, acotó Bárcena: “Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que facilite, fortalezca las posibilidades de acceso de la región a un financiamiento en condiciones más favorables, ojalá concesionales. Es uno de los temas en los que insiste la CEPAL: que haya una mayor redistribución de la liquidez y, por cierto, una mayor redistribución de la concentración de la riqueza y de los ingresos a nivel global”, recalcó. Según la responsable de la CEPAL, la región tiene una tarea pendiente “que es una mayor integración y resiliencia regional porque habrá disrupciones en las cadenas de suministro. La proximidad geográfica tiene que ayudarnos a aumentar la resiliencia en ALC”.

 

3.- Tercer artículo: ¿Cómo prevenir y afrontar las mayores amenazas para la Humanidad?: El rol de la ciencia, la tecnología y la innovación (3)

La pandemia Covid-19 puso en evidencia la alta vulnerabilidad de la humanidad. Durante los últimos cien años, la industrialización, el crecimiento de la población y el desarrollo tecnológico cambiaron notablemente la vida humana. Gracias a los avances médicos las personas están más sanas y viven más tiempo que nunca; gracias a los avances agrícolas e industriales, los niveles de pobreza y el hambre se redujeron significativamente. Pero los cambios también causaron daños graves y duraderos a los ecosistemas de la Tierra y nos exponen, como especie, a diversos eventos potencialmente destructivos. Además de nuevas enfermedades, la vida humana -a escala global- está amenazada por incendios forestales, sequías, contaminación, calentamiento global, mutaciones microbianas e inteligencia artificial dañina.

El artículo aquí reseñado formula una descripción general de algunas amenazas reales para la humanidad en 2022.

(a) Colapso económico-social en China

Si bien China es un titán económico, sus cimientos parecen tambaleantes (“gigante con pies de barro”). Debido a la naturaleza interconectada de nuestros sistemas e infraestructuras, cuando un actor tan importante tiene problemas económicos, prácticamente ningún país puede quedar ileso. Por tanto, las recientes sacudidas financieras en China preocupan a muchos economistas. Por ejemplo, la crisis de deuda de Evergrande (de U$S 300 mil millones) provocó una drástica caída en el mercado de valores chino. En 2022, estas sacudidas podrían provocar un malestar social en China y colapsos del mercado que podrían propagarse por todo el mundo.

(b) Más variantes de COVID-19

La cepa Omicron del COVID-19 se considera la variante de COVID-19 de más rápida propagación. Es probable que aparezcan más variantes con menguante gravedad. Por ahora, las vacunas y sus refuerzos regulares, junto con diversos tratamientos, parecen ser efectivas contra el eventual agravamiento de la enfermedad y el riesgo de muerte.

(c) Cambio climático

El aumento de las temperaturas, los incendios forestales, las inundaciones, las sequías, el derretimiento del hielo polar, los huracanes, el aumento del nivel del mar; todo ello (junto a otros fenómenos) está relacionado con el cambio climático inducido por acciones antropogénicas. Algunas manifestaciones son las siguientes: (a) La OMS afirma que el cambio climático por sí solo ya cuesta alrededor de 150.000 vidas cada año, (b) Para 2030, el aumento del nivel del mar afectará a diversas ciudades costeras, incluidas Venecia, Ámsterdam y Nueva Orleans, (c) El calentamiento afecta drásticamente los patrones climáticos, la disponibilidad de agua, la agricultura y la producción en muchas regiones. Se prevé que, durante los próximos años, la población humana afrontará efectos e impactos aun más graves del cambio climático.

(d) Inteligencia Artificial perniciosa

Se prevé que la inteligencia artificial (IA) podría alcanzar próximamente –en determinados ámbitos- niveles de “inteligencia” que ningún ser humano podría controlar. Pero la IA ya está afectando diversas áreas, desplazando a humanos en diversos puestos de trabajo, vigilando y monitoreando subrepticiamente vidas humanas, potenciando sesgos discriminatorios contra determinados conjuntos de personas, deformando el discurso público en las redes sociales e interfiriendo en el funcionamiento de las democracias modernas.

(e) Guerra nuclear, química, biológica, bacteriológica

Hay alrededor de 14.000 ojivas nucleares en el mundo, de las cuales el 90% son propiedad de EE.UU. o Rusia. Otros siete (7) países mantienen arsenales de armas nucleares: China, Israel, India, Francia, Reino Unido, Pakistán y Corea del Norte. Durante 2021 se manifestaron conflictos que involucran a estados poseedores de armas nucleares. Además, el uso de agentes biológicos o químicos, como gases venenosos y agentes portadores de enfermedades, también podría dar lugar a graves catástrofes. Aun cuando (a la luz de los tratados internacionales) no existen indicios de que alguna nación esté considerando usar alguno de esos recursos bélicos, la escalada de conflictos suscita preocupación.

(f) Escasez de agua

El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) estima que, para 2025, alrededor del 67% de la población mundial se verá afectada por la escasez de agua. Añaden que, incluso en la actualidad, alrededor de mil millones de personas carecen de acceso regular a agua potable y un total de 2.700 millones padecen escasez de agua. Las principales causas de la escasez de agua dulce son: (a) la distribución desigual, (b) la ineficacia en la gestión, y (c) la contaminación. Los problemas del agua ya están transformando la realidad sociopolítica en la Tierra, mientras que las sequías están provocando conflictos violentos y muerte humana.

(g) Otras amenazas

Además de los desafíos mencionados, existen otros factores impredecibles, como erupciones volcánicas, asteroides, terrorismo, pérdida de biodiversidad, etc. que podrían afectar potencialmente a millones de vidas. Hay muchas razones para prever que la ciencia, la tecnología, las innovaciones y el pensamiento positivo permitirán prevenir o enfrentar gran parte de los desafíos.

Referencias:

(1) “América Latina y el Caribe: opciones de desarrollo en el nuevo contexto”. Por Gonzalo Rivas. Puntos sobre la i. Blog del BID para conversar sobre innovación. Diciembre 21, 2021

(2) “América Latina crecerá un 2,1% en 2022, un año que se prevé más complejo que el anterior” Noticias ONU. Asuntos económicos. 12/01/2022

(3)The Question of the Year: What Are the Biggest Threats to Humanity in 2022?” By Rupendra Brahambhatt. Interesting Engineering. Dec 31, 2021 Cutture