Newsletter DPT Nro. 70
ISSN 2618-236X
Marzo / 2022
NOTICIAS DE INTERES GENERAL
Desechos médicos generados por la respuesta contra el Covid-19
Una amenaza para la salud y el medio ambiente
Un nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que las cifras de basura sanitaria generadas durante la campaña global contra la pandemia de Covid-19 son desorbitantes. Por ejemplo, se estima que la mayor parte de las 87.000 toneladas de equipos enviados por la ONU a los países (entre marzo de 2020 y noviembre de 2021) para proteger al personal médico se han convertido en desechos. Por otra parte, el envío de más de 140 millones de kits de pruebas podría llegar a generar otras 2.600 toneladas de residuos (principalmente plástico) y 731.000 litros de residuos químicos, mientras que el suministro de los más de 8.000 millones de dosis de las vacunas habría producido 144.000 toneladas de residuos adicionales en forma de jeringuillas, agujas y cajas de seguridad. Estas cifras sólo proporcionan una estimación inicial de la magnitud del problema sin tener en cuenta los productos adquiridos fuera de la iniciativa de la ONU, ni los residuos generados por el público. Cuando se añaden los residuos generados por los sistemas sanitarios y por miles de millones de personas en todo el mundo, las magnitudes resultan aún más inabarcables.
La acumulación de estos residuos supone una amenaza para la salud de las personas y del medio ambiente y pone de manifiesto la necesidad urgente de mejorar las prácticas de gestión de desechos. Si bien es fundamental proporcionar a los trabajadores sanitarios los equipos de protección adecuados, también lo es garantizar que se puedan utilizar de forma segura sin afectar al medio ambiente circundante. Para lograrlo, se destaca la necesidad de disponer de sistemas de gestión eficaces, que incluyan orientaciones para el personal sanitario sobre qué hacer cuando ya se hayan usado los equipos y los productos sanitarios.
Sin embargo, la realidad del reciclaje de los desechos en los recintos hospitalarios dista de ser óptima. En la actualidad, el 30% de los centros (y el 60% en los países menos desarrollados) no están equipados para gestionar las cargas normales de residuos sanitarios, y mucho menos la cantidad adicional que genera la Covid-19. Esta situación expone a los trabajadores sanitarios a posibles lesiones, quemaduras y a microorganismos nocivos, a la vez que repercute en las comunidades que viven cerca de vertederos y lugares de eliminación de residuos debido a la contaminación del aire por la quema de residuos, la mala calidad del agua o las plagas portadoras de enfermedades.
Se destaca la necesidad de llevar a cabo un cambio significativo en la gestión del flujo de residuos sanitarios, tanto a nivel mundial como en cada hospital y centro de salud. Esta transformación es un requisito básico de los sistemas de atención sanitaria inteligentes desde el punto de vista climático, a los que muchos países se comprometieron en la reciente Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y, por supuesto, de una reparación saludable de los efectos de la Covid-19 y de la preparación para otras emergencias sanitarias en el futuro.
Entre las recomendaciones del informe figuran el uso de embalajes y transportes ecológicos, equipos de protección personal seguros y reutilizables, y materiales reciclables o biodegradables. También se aconseja invertir en tecnologías de tratamiento de residuos que no requieran incineración, así como en logística inversa que apoye el tratamiento centralizado e inversiones en el sector del reciclaje de materiales (como los plásticos).
Por su parte, en las Directrices técnicas sobre manejo medioambiental racional de los desechos biomédicos y sanitarios, dentro del Convenio de Basilea de la ONU, se señala que un manejo eficaz de desechos biomédicos y sanitarios debe tener en cuenta los siguientes factores: (a) Generación y minimización, (b) Separación, (c) Identificación y clasificación, (d) Manejo y almacenaje, (e) Empaque y etiquetado, (f) Transporte dentro y fuera de los establecimientos de asistencia sanitaria, (g) Tratamiento, (h) Eliminación de residuos, incluidas las emisiones, (i) Salubridad y seguridad ocupacionales; salud pública y ambiental, (j) Concientización y educación de los interesados y de la comunidad, (k) Investigaciones sobre tecnologías mejoradas y prácticas benignas para el medio ambiente, y elaboración de las mismas. También destaca otros aspectos importantes, tales como la desinfección, la protección y la capacitación del personal.
Fuente principal: “Los desechos médicos generados por la respuesta contra el COVID-19 se han convertido en una amenaza a la salud y el medio ambiente” Noticias ONU. Naciones Unidas. Salud. 1/02/2022
Fuente complementaria 1: “¿Cómo ha de ser la gestión de residuos durante la pandemia del coronavirus?” Noticias ONU. Naciones Unidas. Salud. 1/04/2020
Fuente complementaria 2: “Cinco cosas que debes saber sobre las mascarillas desechables y la contaminación por plásticos” Noticias ONU. Naciones Unidas. Cambio climático y medioambiente. 28/03/2021